El seguimiento a la comunicación por mensajería que una adolescente sostenía mediante WhatsApp permitió a la Policía de Ecuador desbaratar a una banda criminal dedicada al intercambio de pornografía infantil.
La intervención policial permitió la captura de dos adultos que se hacían pasar por adolescentes para captar menores de edad, seducirlas e integrarlas a un grupo de mensajería denominado “Nopor”. En el mencionado espacio los niños compartían videos y fotografías con contenido sexual explícito. Se supo que más de 30 alumnos de un centro educativo integraban este colectivo ilícito.